jueves, 10 de marzo de 2011

Que las cosas pasan por algo

Se supone que la receta frente a la frustración de no obtener algo que mucho hemos deseado, es pensar que las cosas siempre pasan por algo.
Cuando la gente me dice algo así, pienso: "claro que pasan por algo, pasan porque son el resultado de la causalidad de una serie de eventos..." y me siento oscuramente imposibilitada de sentirme positiva.
Ayer un alumno me dijo: "somos lo que pensamos"... quite a quote...
Me invitó a entender que para que la vida tenga sentido hay que darle sentido partiendo desde el lugar desde donde se está, no desde donde uno quiere estar.
Fijar metas es el primer paso en el proceso de hacer sueños realidad, tener, saber que un pie va adelante de otro y seguir la ruta trazada.
Asumir el flujo de la vida.
Aceptar lo que verdaderamente sentimos y sucede en nuestra realidad.
En la ausencia de lo que se desea, se encuentra la oportunidad de amar lo que sí se tiene: posibilidad infinita.